Bruselas recomienda «encarecidamente» pedir pruebas de COVID-19 a los viajeros procedentes de China

La Unión Europea (UE) ha recomendado «encarecidamente» solicitar pruebas negativas de COVID-19 a todos los viajeros de China que lleguen a territorio comunitario, en respuesta al auge de contagios en el gigante asiático.

«Se recomienda encarecidamente a los Estados miembros que introduzcan, para todos los pasajeros procedentes de China (…) el requisito de una prueba de COVID-19 negativa realizada no más de 48 horas antes de la salida» del país asiático, ha indicado en un comunicado el grupo de Respuesta Política Integrada a las Crisis (IPCR) tras la reunión celebrada este miércoles.

En esa reunión, en la que participan los países del bloque, las instituciones comunitarias y otros expertos, la UE ha acordado «un enfoque de precaución coordinado», a la luz de la propagación del coronavirus en China y teniendo en cuenta «la necesidad de datos suficientes y fiables y la relajación de las restricciones de viaje» por parte del país asiático a partir del próximo 8 de enero.

El IPCR también ha recomendado que todos los pasajeros de vuelos con origen o destino en China lleven mascarillas, que los gobiernos de la UE introduzcan pruebas aleatorias a los pasajeros procedentes de China y que analicen y secuencien las aguas residuales en los aeropuertos con vuelos internacionales y aviones procedentes de China.

España exige el certificado COVID en origen

Este martes, la gran mayoría de los estados miembros ya apostaron por pedir pruebas de COVID-19 a todos los viajeros procedentes de China, incluso antes de su salida del país como respuesta al auge de contagios en el gigante asiático.

 En los últimos días, países como Italia, Francia, EE.UU., India, Reino Unido, Australia o Japón, entre otros, han anunciado restricciones y pruebas PCR a los viajeros procedentes de China, e incluso Marruecos ha llegado a prohibir la entrada al país. Por su parte, China ha calificado de «desproporcionadas» e «inaceptables» las restricciones.

España, por su parte, ya tiene en marcha el control sanitario para los viajeros procedentes de China, que a partir de ahora deberán enseñar su certificado COVID-19 tanto en el aeropuerto de origen como en el de destino. En este certificado deberá constar la vacunación completa contra el coronavirus, o bien el resultado negativo de una prueba diagnóstica.

En primer lugar, será la operadora de transporte la que compruebe en el momento del embarque que se dispone de este certificado, mientras que en el puesto fronterizo de llegada serán los agentes sanitarios quienes realicen la comprobación, según publica este miércoles el Boletín Oficial del Estado (BOE). Esta restricción estará vigente hasta el próximo 15 de febrero. 

China comparte datos con la OMS

Este mismo miércoles, la Organización Mundial de la Salud ha informado de que responsables de salud de China han presentado finalmente datos sobre los casos de COVID-19 al grupo de expertos de la organización, particularmente secuenciaciones del genoma, y ha subrayado que por ahora no ha identificado en ellos mutaciones del virus.

En la reunión, celebrada este martes después de numerosas peticiones de la OMS a China para que compartiera más información sobre la actual explosión de casos en el gigante asiático, se presentaron datos sobre más de 2.000 genomas de positivos recogidos y secuenciados desde el 1 de diciembre de 2022.

China tiene previsto suavizar las restricciones de viaje el 8 de enero, a pesar de la oleada de nuevas infecciones que ha desbordado los hospitales y las funerarias chinas.

España exige un certificado de vacunación en origen a los viajeros procedentes de China

Los viajeros procedentes de China deberán contar con un certificado de vacunación frente a la COVID-19. La comprobación sanitaria se llevará a cabo en origen, en el momento del embarque y, posteriormente, en el puesto fronterizo de llegada por los agentes sanitarios, según publica este miércoles el Boletín Oficial del Estado (BOE).

(Habrá ampliación)

La Unión Europea apuesta por pedir pruebas de COVID-19 a los viajeros procedentes de China

La gran mayoría de los países de la Unión Europea (UE) apuestan por pedir pruebas de COVID-19 a todos los viajeros procedentes de China antes incluso de su salida del país como respuesta al auge de contagios en el gigante asiático.

También se inclinan por recomendar medidas de higiene personal para los viajeros, incluida una recomendación para llevar mascarilla en los vuelos desde China, el control de aguas residuales de los aviones, vigilar la entrada de nuevas variantes en los aeropuertos y mejorar la secuenciación del virus, entre otras medidas.

Estas son las ideas sobre las que han acordado los expertos de los Estados miembros en su reunión de este martes, según ha resumido en la red social Twitter la comisaria de Salud, Stella Kyriakides.

Las medidas forman parte de las recomendaciones de un comité de expertos sanitarios europeos y se debatirá el miércoles en una nueva reunión del grupo de Respuesta Política Integrada a las Crisis para elaborar una respuesta coordinada de la UE ante la explosión de infecciones en China.

Una «gran mayoría» apuesta por tests antes de viajar

En el encuentro de este martes ha surgido una discusión sobre la necesidad de exigir pruebas de COVID-19 a los pasajeros procedentes de China que se realicen incluso antes de la salida del país asiático, una posibilidad apoyada por una «gran mayoría» de los Estados miembros, ha explicado un portavoz comunitario.

Se cumplen tres días en España con controles de coronavirus para viajeros que llegan de China y los expertos nos explican si las pruebas de antígenos y el pasaporte covid son eficaces en este contexto.

En cualquier caso, el portavoz ha subrayado que las medidas que se adopten «deberían estar centradas en los vuelos y aeropuertos más adecuados y ser llevadas a cabo de una forma coordinada para garantizar su efectividad».

«La unidad sigue siendo nuestra principal herramienta contra la COVID-19», ha expresado Kyriakides, titular de Salud de la Comisión Europea, institución que en las últimas fechas ha subrayado la necesidad de que los Veintisiete coordinen su respuesta frente al aumento de los contagios en China.

Desde que se conociera el aumento de las infecciones en China, distintos socios del bloque comunitario han restablecido los controles para viajeros procedentes del país asiático, aunque otros, como Bélgica, han optado por no exigir a los viajeros de este país la realización de un test.

En España, hay medidas en vigor desde el 31 de diciembre y consisten en un control documental, visual y de temperatura y en la realización de una prueba diagnóstica.

La reunión de los expertos sanitarios de los Estados miembros de este martes ha coincidido con un informe del Centro Europeo para el Control de Enfermedades (ECDC) en el que este organismo concluye de nuevo que la subida de casos de coronavirus en China no supone de entrada un «reto» para los países de la UE debido a que se trata de las mismas variantes que ya circulan en el continente y a la alta inmunidad y los índices de vacunación. 

China ha condenado las pruebas COVID-19 obligatorias impuestas ya por una docena de países de todo el mundo y ha advertido de que podría tomar «contramedidas» en represalia. Pekín puso fin a principios de diciembre a su draconiana política de «Covid cero», que provocó una explosión del número de infecciones entre la población china, y levantará el domingo sus requisitos de cuarentena para los viajeros que lleguen del extranjero.

Mientras tanto, la Comisión Europea ha ofrecido a China vacunas para frenar la ola de contagios, aunque las autoridades chinas todavía no han respondido a esta oferta. «A la luz de la situación en China, la comisaria Kyriakides contactó a sus homólogos chinos para ofrecer la solidaridad y el apoyo de la UE, esto incluye experiencia en salud pública y también donaciones de vacunas de la UE adaptadas a variantes», explicó en una rueda de prensa un portavoz comunitario.

Aterrizan en Madrid los primeros pasajeros de China a los que se aplica controles COVID

Con hora y media de retraso han aterrizado este sábado en Madrid a las 19.45 horas los pasajeros del primer vuelo procedente de China tras implantar España controles sanitarios a estos viajeros, a quienes se ha revisado la documentación y tomado la temperatura.

Desde este sábado España ha puesto en marcha medidas de control sanitario a pasajeros procedentes de vuelos con origen en China, a quienes se somete a un control visual y de temperatura y a una prueba diagnóstica de infección activa por SARS-CoV-2, aunque las personas entrevistadas han explicado que solo se les ha tomado la temperatura.

Entre los familiares que han esperado en el aeropuerto a sus familiares se encuentra Vanesa, hermana de Israel, que trabaja en un laboratorio de una Universidad de Xian, y que regresa a España después de tres años debido a las restricciones de movilidad impuestas en el país asiático por la pandemia.

En estos momentos, explica Vanesa, no hay información oficial en China de lo que está ocurriendo con los contagios pero muchas personas del entorno de su hermano han sufrido la infección por la COVID-19.

Israel llega con cuatro vacunas puestas, sin embargo » mucha gente no se lo ha puesto» allí, explica Vanesa, quien ha tenido que informar a su hermano de las nuevas medidas impuestas por el Ministerio de Sanidad.

En China, ha continuado, muchos ciudadanos, ante la sospecha de estar infectado, «se queda en casa» porque no desean ser derivados al hospital.

Los controles se mantendrán hasta el 15 de febrero

Tras señalar que su hermano tenía «unas ganas locas de venir a España», a pesar de que los precios de los billetes de las aerolíneas se han duplicado, añade que si él pudiera «no regresaría» pero no puedo si no encuentra trabajo en España.

Los controles se mantendrán hasta el 15 de febrero de 2023 y afectarán a los pasajeros de vuelos con origen en la República Popular China, de forma que los vuelos de otros lugares, como Hong-Kong, no se verán afectados.

Las tripulaciones, los menores de doce años y los pasajeros que lleguen a España en tránsito, siempre que no abandonen el aeropuerto y cuya estancia no sea superior a 24 horas, quedarán excluidos de estas medidas, adoptadas ante la preocupación por la evolución de la ola de contagios en China y la dificultad de hacer una correcta evaluación de la situación.

Segundo gobierno europeo en imponer controles en la frontera

La resolución del Ministerio de Sanidad, publicada este sábado en el BOE, también prevé la exigencia de un Certificado COVID Digital de la UE (CCD-UE) o equivalente a todos los pasajeros de vuelos procedentes de China desde el próximo 3 de enero.

A excepción de los vuelos procedentes de China, no se realizan controles sanitarios por COVID-19 para entrar en España.

El Gobierno español es, tras el italiano, el segundo de Europa en imponer controles en la frontera -prueba diagnóstica negativa certificado vacunal- a los viajeros procedentes de China, algo que también ha hecho Estados Unidos, Japón e Israel, entre otros.

Según el Centro Europeo para el Control de Enfermedades (ECDC), la subida de casos de coronavirus en China no supone de entrada un «reto» para la Unión Europea porque son las mismas variantes que ya circulan en el continente y a la alta inmunidad y los índices de vacunación de la población. «No se espera que una subida de casos en China impacte la situación epidemiológica de COVID-19», señaló este viernes el ECDC.

La OMS urge a China a compartir datos en tiempo real

 La CE recuerda que Pekín levantará las restricciones de viaje el próximo 8 de enero y pide atención a los Estados miembros porque «los datos epidemiológicos o los datos de prueba para China son bastante escasos, la vacunación general la cobertura en China es baja y no hay una decisión de equivalencia» con el certificado europeo de vacunación.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) se mostró recientemente  «muy preocupada» por la evolución de la COVID-19 en China y reclamó «más información», a lo que Pekín respondió que ha compartido sus datos «de forma abierta, puntual y transparente» desde el inicio de la pandemia.

La rápida propagación del virus por el país ha sembrado dudas sobre la fiabilidad de las cifras oficiales, que han informado de apenas un puñado de fallecimientos recientes por la enfermedad pese a que localidades y provincias han calculado que una proporción significativa de sus poblaciones se ha contagiado. 

La explosión de contagios en China pone en alerta al mundo ante la aparición de nuevas variantes de coronavirus

El anuncio de la apertura de fronteras de China en medio de su peor ola de COVID-19 ha hecho saltar las alarmas a nivel mundial ante el temor de la aparición de nuevas variantes, lo que ha provocado el restablecimiento de medidas preventivas en países como España, Italia o Estados Unidos, así como un aumento de la vigilancia de casos. 

Pero, ¿es esta una posibilidad real? ¿estamos preparados para nuevas variantes? Para el exdirector de Acción Sanitaria en situaciones de crisis de la OMS, Daniel López Acuña, la explosión de contagios en el país asiático sí que «incrementa la probabilidad de que surjan variantes amenazantes más virulentas y que escapen a la eficacia vacunal», según explicó en una entrevista en RTVE.es. «Por supuesto que puede tener repercusiones en cascada en Europa, pero mas aún en los países menos desarrollados donde solo el 25% de la poblacion está vacunada», ha añadido sobre esta posible nueva amenaza.

En esta línea también se ha expresado el catedrático de Genética de la Universidad de Valencia, Fernando González, que recuerda la situación generada con omicrón. «Hay un aumento de la probabilidad de que aparezcan variantes completamente diferentes a las que hemos observado, al igual que sucedió cuando apareció la variante ómicron cuando delta era la dominante en la práctica totalidad de países», ha considerado en declaraciones a SMC España recogidas por Europa Press.

Pese a ello, los inmunólogos confían en la efectividad de las vacunas y en la posibilidad de adaptarlas en caso de que ocurran los peores escenarios. «Tenemos la ventaja de que cuando estas variantes evolucionan aprendiendo a diseminarse mejor, se van optimizando también al mismo tiempo se atenúan», ha explicado a TVE el jefe del laboratorio de coronavirus del CNB-CSIC.

España e Italia pedirán PCR negativa a los viajeros procedentes de China

La preocupación ante las nuevas variantes también fue mencionada el viernes por la ministra de Sanidad, Carolina Darias, justificando así la nueva exigencia de presentar una PCR negativa o pauta de vacunación completa a todos los viajeros procedentes del país, y apostando por el aumento de la secuenciación virus y de la vacunación, especialmente, en los vulnerables.

Desde la Sociedad Española de Inmunología, también resaltan la importancia de la inoculación para evitar nuevos casos graves. «Hemos tenido muchos contactos, tanto con la vacuna como con el virus, y eso hace que estemos preparados para bastantes variantes», ha asegurado la la investigadora Carmen Cámara. 

Previo al anuncio de España, otros países como Italia también han impuesto la medida ante la ausencia de nuevas restricciones por parte de la Unión Europea, que se ha limitado a realizar un llamamiento a sus miembros para la «coordinación». «Sabemos la importancia de actuar con coordinación, pero también la importancia de actuar con celeridad», indicó Darias, que apuntaba a que «son lecciones de la pandemia».

Estados Unidos, Japón, Corea del Sur, Filipinas e Israel también han implantado la medida en sus territorios ante la posibilidad de que la movilidad china se disparare a partir del próximo 8 de enero, cuando decae el cierre de fronteras que el país impuso por su política ‘COVID cero’. Esta fecha es también muy próxima también a la celebración del Año Nuevo Chino a finales de mes, que podría conllevar millones de desplazamientos, después de tres años de restricciones.

«La apertura de fronteras por parte de China supondrá inevitablemente que muchos contagios asintomáticos u oligosintomáticos viajarán y se convertirán en generadores de contagios fuera de las fronteras chinas», ha lamentado López Acuña.

Los servicios sanitarios de China, al límite

China vive una explosión de casos, tras el fin de su estricta política de COVID cero. Su estrategia ha generado una escasa exposición al virus por parte de sus ciudadanos en los últimos años y, por tanto, una menor inmunidad de grupo. Además, los contagios se han extendido de manera rápida en los últimos días, debido a su estructura de ciudades superpobladas y una alta movilidad.

Otra de las causas a las que apuntan los expertos es que las vacunas chinas – Sinovac, Sinopharm y CanSino-, que han sido aceptadas por la OMS, tienen una eficacia reducida frente a otras utilizadas a nivel mundial. A esto se añade una cobertura vacunal insuficiente, especialmente, en las dosis de refuerzo, lo que ha puesto al límite los servicios sanitarios del país.

La vacunación, el talón de Aquiles de China en su lucha contra el coronavirus

«La situación es muy seria por el tamaño de la población china, las bajas tasas de vacunación, la política de COVID cero, que ha hecho que la población esté mucho más virgen al virus y por el hecho de que allí se ha vacunado con una vacuna menos eficaz», ha enumerado en RNE López Acuña, que ha tildado de «tibia» la respuesta de la UE ante la oleada de casos en China. 

Por el momento, desconoce el número total de casos en China. Mientras que las autoridades pararon las estadísticas de contagios en casi 400.000 y la de fallecimientos, en 5.241 desde el comienzo de la pandemia, otras entidades como la Univesidad de Johns Hopkins cifran en 4,4 millones los infectados y en casi 17.000 las muertes a causa de la COVID-19.

Vacunación y el uso de mascarilla

A la situación en China, se une la propia advertencia de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) hace dos meses de la posibilidad de una nueva ola de contagios de COVID-19 en Europa debido a la variante ómicron, la llegada del temporal invernal y la convivencia con otras enfermedades respiratorias como la gripe. 

Dada esta situación, las recomendaciones más señaladas por los epidemiólogos siguen siendo recibir la vacunación conjunta de la gripe y de la COVID-19, especialmente los grupos de riesgo y el uso de la mascarilla en el transporte público y en interiores mal ventilados. «Hemos bajado la actitud de protección, pensando que esto ya está zanjado, pero la dinámica de la pandemia sigue activa «, ha advertido López Acuña. 

La vacunación contra la COVID-19 en España alcanzó el objetivo inicial de inmunizar al 70% de la población adulta con la pauta completa. A día de hoy, más de 40,7 millones de personas -el 85,9% de la población- han recibido la pauta completa de vacunación contra el coronavirus, pero
tan solo el 55,2% de los mayores de 60 años han recibido la cuarta dosis, adaptada a ómicron. 

En este sentido, Fernando González recuerda que las vacunas actuales siguen protegiendo con alta eficiencia, pero que hay que aumentar la secuenciación. «La vigilancia genómica del SARS-CoV-2 lo que nos permite es acelerar la respuesta ante la evolución del virus en caso de que esta se produzca», ha concluido, para intentar no repetir en 2023 los errores del 2020. 

La OMS pide a China transparencia en el intercambio de datos sobre la nueva ola de COVID-19

La Organización Mundial de la Salud ha pedido este viernes a China transparencia en el intercambio de datos de la nueva ola de COVID-19 que tiene en vilo al mundo

La OMS ha señalado que este viernes tuvo lugar una reunión de alto nivel entre expertos de esta entidad y de sendos organismos de la sanidad de China para discutir sobre la ola de casos de COVID-19 en este país, que inquieta a toda la comunidad internacional.

En un comunicado, la OMS ha señalado que participaron en la reunión representantes de la Comisión Nacional de Salud de China y de la Agencia Nacional de Control y Prevención de Enfermedades, que explicaron la estrategia y acciones que está tomando el Gobierno chino en las áreas de epidemiología, monitoreo de variantes, vacunación, atención clínica, entre otras.

Datos sobre secuencias genéricas e impacto de la enfermedad

Según la información difundida por la OMS, sus especialistas pidieron a la contraparte china que informe de forma regular y en tiempo real sobre la situación epidemiológica en su país.

La información solicitada debe incluir datos sobre secuencias genéricas e impacto de la enfermedad.

Entre los detalles que se solicitan están las estadísticas de hospitalizaciones, admisiones en unidades de cuidados intensivos, fallecimientos, así como el número de vacunas administradas y el estatus de vacunación de la población, en particular entre los mayores de 60 años.

La OMS ha reiterado ante los representantes chinos que la vacunación y las dosis de refuerzo son importantes para prevenir un desarrollo grave de la enfermedad y el riesgo de muerte.

Asimismo, la OMS ha ofrecido su apoyo en todas las acciones que sugiere, así como en comunicación para contrarrestar el recelo que puede existir entre la gente en relación a la vacunación.